Cuantas veces habremos quedado hipnotizados mirando los dibujos de Maurits Cornelis Escher (1898 - 1972) dibujante singular del siglo XX, que como los estudiantes de nuestro taller 223 de M1, estudió arquitectura unos años, hasta que se dio cuenta que no era lo suyo.
Hoy no vamos a ponderar su técnica superlativa sino que vamos a resaltar la reflexión que proponen sus acertijos gráficos. Me refiero a sus dibujos como verdaderos acertijos ya que transgreden la lógica de los sistemas de representación geométrica. Esa transgresión es la cualidad que lo destaca como un verdadero crítico de la representación académica.
Escher fue un perverso, brillante pero perverso que seguramente disfrutó con la locura que le provocó a más de uno en su momento que intentó construir sus ideas. Como arquitecto le hubiera ido pésimo? Buena pregunta, verdad?
ResponderEliminarPero lo queremos, sin duda alguna